fbpx

LA CESTA DE MANZANAS

Volver al Entradas

LA CESTA DE MANZANAS

Había una vez….

Un niño paseando por un campo de frutales

En este caso eran manzanos

Y vio a lo lejos a un anciano, que con una pequeña cesta, iba recogiendo las manzanas que habían caído del árbol y estaban en el suelo

Se acercó con curiosidad y para su asombro observó, como el anciano se limitaba a recoger la fruta caída, la picada, arrugada….pero en ningún momento tomó ninguna manzana fresca, aparentemente sana

El anciano, sonriente, le preguntó si le gustaban las manzanas, a lo que el niño asintió, añadiendo que era su fruta favorita

El anciano gentilmente, le ofreció una de su recolecta, a lo que el niño mucho más impactado dijo:

-¡¡¡no!!! yo no quiero de estas, quiero de esas, señalando la manzana del árbol, que permanecía intacta …

Y además le preguntó… ¿Por qué teniendo estas tan buenas, eliges esas tan picadas? Incluso alguna parece podrida…

Y el anciano respondió…

-Tú eliges aquello conoces y  que eres tú…una fruta fresca, lozana, que no ha sido azotada por el viento, ni por la lluvia y permanece sostenida y alimentada por el árbol que le dio vida

Sin embargo, yo, viejo loco…, elijo las que son como yo…las frutas del árbol caído, que  el viento arrancó. Un viento sabio que reconoce las que están preparadas para soltarse del árbol, sin nadie que las sostenga, les alimente, ni les dé vida. Tienen que hacerlo por sí mismas.

El niño estaba muy impresionado y le preguntó…¡¡¡pero algunas llevan gusanos!!!

Y el anciano muy divertido, tomo una y le mostró:

-Sí, estos gusanos abrieron un camino desde su corazón, y dejaron un orificio por donde penetran los rayos del sol y por eso,  son las únicas que tienen vida en su interior.

Si las colocas con las otras, la fruta nueva, cree, que se contamina y se pudre; pero lo que no saben, es que vienen a recordarles a todas, que antes o después se arrugarán, se pudrirán o las habitará algún gusanillo.

¿Y sabes una cosa?, (dijo el anciano con amoroso humor…);

Y sino les llega a ocurrir,  es porque alguien se las comió antes.

 

MORALEJA: La sabiduría no se adorna para gustar y  como la fruta madura, todo llega en su tiempo. La apariencia es sabrosa a los ojos del que no puede ver de otra manera. El corazón reconoce y abraza la vida.

HUMILDAD, QUE LA VIDA DA MUCHAS VUELTAS

Autoría: Eva García

 

Compártelo

Volver al Entradas
X
X